sábado, 16 de marzo de 2024

                                                                  NUEVO DIA

Hoy llama a mi ventana la luz del nuevo día con sensaciones a flor de sueño, con vivencias a flor de piel que, aún dormida, lucha por adentrarse en la naciente realidad. 

La suave luz del amanecer va disipando las brumas de los sueños aún latentes, y enciende las calles del día por donde caminar pasos a la luz de la ilusión.

El aire nuevo perfumado de encinas y olivos trae aromas de esperanza entre sus pasos de verde eterno, mientras en mi yo perdura el aroma de tu piel fundida con la mía.

 La rosa encarnada de mi beso en tu mejilla, el blanco jazmín de tu caricia entre mis manos y el clavel matizado de oro y carmesí de tu beso en la playa de mis labios.

Las estrellas infinitas de tu mirada de universo se funden en la noche blanca de mi yo en fase de luna nueva. Los ecos apagados de tu caminar conmigo por el camino en blanco de un sueño entre dos almohadas.

Todo va quedando atrás, como guardado en un cofre del tiempo, grabado en esa otra realidad que nos junta y separa a la vez, que nos hace vivir dos realidades, inventando sensaciones, soñando anhelos, dibujando sueños.

Ahora que nace el día, que todo es sin ti, que lo soñado se diluye tras ser vivido, ahora que el día escribe otro tiempo, otra luz, otros colores, otros sonidos, otros sentimientos, ahora lleno de ti como cada instante, he lavado mi cara y mis manos con el agua clara del amanecer en mi ventana.

He abierto mis brazos a la esperanza y la he abrazado fuerte. Trae olor a ti entre sus pasos de verde primavera. Trae tu color en su mirada azul al mediodía, trae tu sabor entre las notas cristalinas del canto de jilgueros y golondrinas. Trae el tacto de tu piel entre sus ropas de ilusión al amanecer.

En su canción de alba y jazmín brillan notas de estrellas con aromas de arco iris, de rosas blancas y rojas en un piano con teclas de arena y espuma y notas de agua y sal.

Otro día más sin ti toca vivirte imaginando, toca soñarte como siempre y como nunca, inventarte como jamás imaginé, intentando vivir a golpe de sueño y anhelo, ilusión y deseo.

Los momentos vitales de no estar contigo se vuelven letras oscuras a la espera del reencuentro a la luz del sueño en blanco de un folio, con las luces del amanecer. 

Y el instante supremo del abrazo en espera se hace alborada con luz de luna llena mientras tu beso enciende mi día con letras azules de realidad.


                    Foto de Pepi Enciso Pizarro

                    https://youtu.be/SP0yRqT_6RM?si=2f_syDTlCRszB-Ci